Las apariencias que mataron a Jenni Rivera

Columna: El Vuelo del Tecolote
Diario Intolerancia
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Existen muchas versiones del accidente aéreo en el que perdieron la vida Jenni Rivera, acompañantes y pilotos; algunos de ellos muy veraces y ciertos, aunque otros, lamentablemente, carentes de toda realidad. Entre todas las hipótesis y versiones en el medio aeronáutico, el punto de encuentro al que llegan es que, en este accidente, el factor común fue seguir apariencias falsas.

Por lo visto, al elegir Jenni Rivera la aeronave en la que viajaría aquella noche, se dejó guiar por las apariencias visuales y económicas, pero tal vez no se dio a la tarea de investigar los aspectos realmente importantes: estatus de mantenimiento, año de fabricación, documentación y desempeño de la aeronave.

Es muy común guiarnos por las apariencias, pero en el caso de al aviación, estas pueden tener consecuencias fatales. Aquellos ajenos a la aviación general y ejecutiva, que empiezan a enrolarse en este medio, comúnmente son atraídos por el glamour y las velocidades de los jets, por el simple hecho de contar con impulso a chorro; aunque muchas veces, no sea realmente la mejor opción.

Las fábricas de aeronaves son responsables por el desempeño y prestigio de sus equipos, que son seguros y confiables. Por lo anterior, entre más antigua es una aeronave, mayor cantidad de aseguradores de calidad requiere: cuidados, revisiones, boletines, directivas, etc. Consecuentemente, cuanto más vieja es el producto, más caro es su mantenimiento. Siendo así, lo más recomendable al volar, es revisar detalladamente quien y donde le ha dado mantenimiento. Entre más serio, certificado y profesional sea el taller y su personal, los índices de seguridad serán más altos. Algunas veces, lamentablemente, personas con escasa moral deciden hacer "maromas" con tal de ahorrarse esas inversiones en mantenimiento, lo que puede resultar en vidas perdidas.

La próxima vez que vuele, amigo lector, no olvide asesorarse de un profesional de aviación; vea por su seguridad ante todo. En aviación, "no todo lo que brilla es oro".